A continuación destacamos algunas consideraciones que los padres con niños con epilepsia deberían tener en cuenta:
- Es importante que toda la familia tenga conocimiento de la enfermedad e intenta aprender lo máximo sobre ella.
- Se aconseja hablar abiertamente sobre la epilepsia con su hijo/a.
- Intentar establecer rutinas; sobre todo, en la medicación y cantidad suficiente de horas de sueño para disminuir el riesgo de crisis.
- Se aconseja no tomar ante él una actitud “superprotectora”. El niño con epilepsia necesita una atención especial pero no es necesario sobre protegerlo. Se debe emplear una actitud de discreta vigilancia para evitar accidentes durante las crisis.
- Puede practicar cualquier tipo de deporte, aunque es preferible evitar cualquier deporte peligroso. El tenis, el baloncesto y el fútbol son muy aconsejables. La natación, también. Aunque siempre que esté supervisado por alguien que sepa qué debe hacer en caso de crisis.
- Se deben adoptar medidas de protección ante la práctica de determinados deportes. Como por ejemplo, para navegar, debe llevar un chaleco salvavidas como cualquier niño. Pueden montar en bicicleta y a caballo usando casco de seguridad, como todos los niños.
- Al utilizar videojuegos o ver la TV, el niño con epilepsia fotosensible debe sentarse, como mínimo, a un metro (videojuego) o 3 m. (TV). Al cambiar los canales de TV, debe utilizar mando a distancia y en su defecto debe cubrirse un ojo al cambiar el canal. Para jugar al videojuego, se recomienda que sea en una habitación con luz y no más de una hora.
- En el colegio: es necesario informar al profesor para que sepa qué debe hacer en caso de crisis.
- Muy importante para los padres: no trates de hacerlo todo solo. Es recomendable formar parte de una red de apoyo como las asociaciones de pacientes.